Especialistas en infecciones de los Institutos y hospitales más importantes de México, valoraron la efectividad de la tecnología ultravioleta (UV-C) como herramienta para desinfectar áreas críticas en hospitales.
Los profesionales de la salud coincidieron en que esta tecnología es efectiva para reducir la carga bacteriana sobre todo en áreas de alto riesgo dentro de los establecimientos de salud; y que los desafíos se encuentran en el entrenamiento de personal, la coordinación del tiempo de desinfección y el mantenimiento adecuado del equipo.
Andrea Hernández Trejo, coordinadora de Vigilancia Epidemiológica del Hospital Ángeles detalló que en su caso, esta tecnología es útil en todas las áreas del hospital, no solo las críticas, y depende de la prioridad o riesgo de infección de los pacientes, se hace uso del sistema UV-C
“Tenemos un calendario por día que registra las áreas en las que se necesita realizar un exhaustivo. Primero se realiza el exhaustivo, posteriormente ocupamos tecnología ATP (bioluminiscencia) para validar qué tanta materia orgánica quedó en las superficies, y después de eso, entra ya el uso de la desinfección con luz ultravioleta”
En el calendario separamos áreas críticas, semi críticas y no críticas, por tanto la tecnología UV-C se utiliza en todos los servicios del hospital como son las unidades de trasplantes, terapias intensivas, y cuidados coronarios.
De acuerdo a la prioridad o el riesgo de infección en los pacientes que tratamos, realizamos desinfecciones con mayor frecuencia en las áreas críticas de la unidad hospitalaria”, declaró.
Tecnología ultravioleta es útil en todas las áreas de servicio
Estudios especializados aseguran que más del 50% de las superficies hospitalarias no se limpian adecuadamente.
Un análisis realizado por la empresa Surfacide a la base de datos del Sistema Automatizado de Egresos Hospitalarios, reveló que los pacientes con infecciones ocupan una cama 3 veces más que los que no las tienen, es decir, 13 días más de estancia únicamente dedicados a las infecciones.
La Dra. Ana Estela Gamiño Arroyo, infectóloga adscrita al Departamento de Epidemiología Hospitalaria del Hospital Infantil de México “Federico Gómez” (HIMFG), declaró que entre 2018 y 2022 registraron una disminución de 2.63% en la tasa de infecciones debido al uso de esta tecnología.
“Para establecer estrategias, los establecimientos de salud deben tener muy claro el panorama: qué sí funciona y qué no dentro de sus hospitales y qué tasa tenían antes de iniciar con una nueva tecnología”, dijo.
XXVIII Congreso Asociación Mexicana para el Estudio de Infecciones Nosocomiales
Los especialistas destacaron que el uso de la tecnología UV-C ha disminuido significativamente las infecciones causadas por bacterias resistentes.
Lo anterior resulta en una menor estancia hospitalaria y menor riesgo de complicaciones; sin embargo, no reemplaza las medidas básicas de prevención y control de infecciones, como son el lavado de manos y una limpieza adecuada.
“Es una tecnología de vanguardia que tiene la capacidad de garantizar un entorno seguro para nuestros pacientes. La utilizamos en todas las áreas de servicio, no solo en las áreas críticas, y el personal afanador tiene un papel clave”, destacó Andrea Hernández Trejo, coordinadora de la Unidad de Vigilancia Epidemiológica y Comité para el Control y Detección de las Infecciones Nosocomiales del Hospital Ángeles.
Los profesionales de la salud coincidieron en la necesidad de desarrollar protocolos claros y detallados para el uso de la tecnología UV-C, incluyendo tiempos de exposición, áreas de aplicación y medidas de seguridad, así como crear conciencia entre todo el personal del hospital sobre la importancia y el uso adecuado para una implementación exitosa.