De acuerdo a las estimaciones del Centro Nacional de Referencia para la Vigilancia de las Infecciones Hospitalarias de Alemania, cada año mueren hasta 15 mil pacientes de infecciones adquiridas en el hospital. Aquí, las bacterias resistentes a múltiples fármacos, contra las cuales los antibióticos comunes ya no son efectivos, juegan un papel importante. ¿Pero de dónde vienen estos patógenos? En el estudio más grande de este tipo en Europa, los científicos del Centro Alemán para investigación de las infecciones (DZIF, por sus siglas en alemán) de la Universidad de Colonia lo investigaron y descubrieron que casi el 10% de los pacientes que ingresan a los hospitales ya tienen con ellos estos temidos patógenos que traen desde sus hogares.
“Nos sorprendió que en el ingreso hospitalario casi 10% de pacientes se encuentra colonizado con patógenos resistentes a múltiples fármacos“, explica el Dr. Axel Hamprecht de la Universidad de Colonia. El coordinador este estudio, en el que participaron 6 hospitales universitarios alemanes, junto con el profesor Harald Seifert, también de la Universidad de Colonia, y colegas de Charité Berlin. Más de 4 mil adultos fueron estudiados para detectar enterobacterias resistentes a múltiples fármacos al ingreso al hospital por medio de muestras de heces o hisopos rectales.
Las enterobacterias como Escherichia coli constituyen una parte normal de la flora intestinal y no son patógenas, siempre que permanezcan en el intestino. Sin embargo, pueden causar infecciones en otros órganos, por ejemplo, infecciones del tracto urinario. Una infección causada por bacterias resistentes a múltiples fármacos es mucho más difícil de tratar y requiere el uso de antibióticos de último recurso. En sus investigaciones, los investigadores prestaron especial atención a un grupo de bacterias que a menudo son problemáticas en los hospitales: las llamadas enterobacterias resistentes a cefalosporinas de tercera generación (3GCREB, 3 generation cephalosporin-resistant enterobacteriaceae). Estas bacterias intestinales resistentes a múltiples fármacos, entre ellos las cefalosporinas y otros fármacos, se han extendido por todo el mundo en los últimos años.
Al igual que la penicilina, las cefalosporinas son antibióticos que matan las bacterias al inhibir la síntesis de la pared celular bacteriana. Las cefalosporinas de tercera generación más nuevas son efectivas contra un amplio espectro de bacterias y pertenecen al grupo de los antibióticos más utilizados. Sin embargo, a lo largo del tiempo, las bacterias se han defendido y han adquirido la llamada beta-lactamasa, una enzima que hace que estos antibióticos sean ineficientes. Las enterobacterias se transmiten por infección de contacto directo, principalmente a través de las heces y los alimentos.
Uno de casa diez paciente lleva los patógenosal resistentes a múltiples fármacos al hospital
De los 4,376 adultos que fueron estudiados para detectar patógenos 3GCREB al ingresar a uno de los hospitales participantes, 416 eran portadores de estos patógenos resistentes a múltiples fármacos. Esta prevalencia es más alta de lo que se informó anteriormente en Alemania. A menudo, los científicos encontraron la bacteria Escherichia coli productora de betalactamasa. La prevalencia de estos patógenos resistentes a múltiples fármacos difería de un hospital a otro.
Para dilucidar los factores de colonización con estas bacterias, los pacientes completaron un cuestionario sobre estancias hospitalarias previas y sus hábitos de vida. “Los pacientes que han tomado antibióticos y viajan fuera de Europa están en mayor riesgo“, dice Hamprecht, subrayando dos hallazgos importantes de la investigación.
Los expertos recomiendan más higiene y menos antibióticos
¿Qué se puede hacer para prevenir la propagación de patógenos resistentes a múltiples fármacos lo antes posible? Hamprecht asegura “Con tantas personas afectadas, la estrategia de aislar a los pacientes dentro de los hospitales ya no funciona. Además, en contraste con otros grupos de bacterias resistentes a múltiples fármacos como las cepas MRSA (Staphylococcus-aureus resistentes a la meticilina), para los que se tienen un saneamiento estandarizado, no se han establecido medidas para 3GCREB“. En cambio, Hamprecht y Seifert recomiendan:
- Mejorar las medidas de higiene en hospitales y prácticas
- Uso racional de antibióticos y especialmente reducir su administración no justificada
- Más capacitación para los médicos
Referencias
- A. Hamprecht, A. M. Rohde, M. Behnke, S. Feihl, P. Gastmeier, F. Gebhardt, W. V. Kern, J. K. Knobloch, A. Mischnik, B. Obermann, C. Querbach, S. Peter, C. Schneider, W. Schröder, F. Schwab, E. Tacconelli, M. Wiese-Posselt, T. Wille, M. Willmann y H. Seifert; Colonization with third-generation cephalosporin-resistant Enterobacteriaceae on hospital admission: prevalence and risk factors Journal of Antimicrobial Chemotherapy, Volume 71, Issue 10, Octubre 2016, Paginas 2957–2963; DOI:10.1093/jac/dkw216; Disponible en el URL https://academic.oup.com/jac/article/71/10/2957/2388059